Que importancia pueden tener el tiempo y el espacio. la distancia entre uno y otro punto. Los otros que nos siguen, los lazos que nos unen a ellos, la certidumbr de la lucha, el amor a la vida...
Otros verán el nacimiento de otras islas grandes y pequeñas
De aquí a cincuenta años a la luz del sol rojo que acaba de salir o quizás sean cien o doscientos o muchos más años otros contemplarán el crecimiento de las espigas. Nosotros otros una y muchas generaciones. así que no importa el tiempo y el espacio si de un punto a otro los recorre el movimiento.
Hay una escuela posible en los ojos de Camila una escuela con mediecitas blancas y un anhelo infinito por los viernes único día para llevar juguetes
Hay una patria que espera sembrada de banderas donde amor y maestro conjuguen nuevos tiempos donde mapa viento suelo mar no sólo sean conceptos y el abrazo una puerta que se abre infinita
Escuela de regazo, lágrima y hallazgo de encuentro despedida y ganas de volver
Una escuela posible que no duela en el tiempo que no rompa la risa que no calle el silencio que no ofrende a la muerte que condene el más nunca
Edificada en los sueños de la utopía posible del cambio sin herida
Una escuela que mire hacia el pasado y se inmole serena al porvenir
Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz. La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única.
¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras, la vaga erudición el aprendizaje de las palabras que usó el áspero Norte para cantar sus mares y sus espadas, la serena amistad, las galerías de la Biblioteca, las cosas comunes, los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra militar de mis muertos, la noche intemporal, el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo, es la medida de mi tiempo. Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se levanta a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por la ventana, pero la sombra no ha traído la paz.
Es, ya lo se, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera y la espera y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.
Es el amor con sus mitologías, con su pequeñas magias inútiles. Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar. Ya los ejércitos que cercan, las hordas. (Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)
El nombre de una mujer me delata. Me duele una mujer en todo el cuerpo
NOS-OTROS
ResponderEliminarQue importancia pueden tener
el tiempo y el espacio.
la distancia entre uno y otro punto.
Los otros que nos siguen,
los lazos que nos unen a ellos,
la certidumbr de la lucha, el amor a la vida...
Otros verán el nacimiento de otras islas
grandes y pequeñas
De aquí a cincuenta años
a la luz del sol rojo que acaba de salir
o quizás sean cien o doscientos
o muchos más años
otros contemplarán el crecimiento de las espigas.
Nosotros otros una y muchas generaciones.
así que no importa el tiempo y el espacio
si de un punto a otro los recorre el movimiento.
Ricardo Morales
La escuela posible
ResponderEliminarHay una escuela posible en los ojos de Camila
una escuela con mediecitas blancas
y un anhelo infinito por los viernes
único día para llevar juguetes
Hay una patria que espera
sembrada de banderas
donde amor y maestro
conjuguen nuevos tiempos
donde mapa viento suelo mar
no sólo sean conceptos
y el abrazo una puerta
que se abre infinita
Escuela de regazo, lágrima y hallazgo
de encuentro despedida y ganas de volver
Una escuela posible
que no duela en el tiempo
que no rompa la risa
que no calle el silencio
que no ofrende a la muerte
que condene el más nunca
Edificada en los sueños
de la utopía posible
del cambio sin herida
Una escuela que mire hacia el pasado
y se inmole serena al porvenir
Los hijos son camino
de vuelta hacia la escuela
Yurimia Boscán
Las cosas
ResponderEliminarLas cosas viven del deseo
de nuestras manos
de cuanto se entrega
al tacto de la vida
con los usos terrestres.
Hondas, extrañas, objetivas
entre los hombres y la niebla,
guardan de Dios sólo una idea
confusa de intemperie.
Pero rebozan de deseos,
de sensación dispersa.
Bajo sus pliegues hay murmullos,
sordos aromas, pétalos.
No tienen ojos sino sombra
y alas que se repliegan
cuando reposan mansas, alineadas
por largo tiempo.
Los hombres cruzan a su ldo,
están y no están en la Tierra.
Las cosas son ventanas mudas
donde se vierten.
Eugenio Montejo
CÓMO NACEN LAS BANDERAS
ResponderEliminarEstán así hasta hoy nuestras banderas.
El pueblo las bordó con su ternura,
cosió los trapos con su sufrimiento.
Clavó la estrella con su mano ardiente.
Y cortó, de camisa o firmamento,
azul para la estrella de la patria.
El rojo, gota a gota, iba naciendo.
Pablo Neruda
El amenazado
ResponderEliminarEs el amor. Tendré que ocultarme o huir.
Crecen los muros de su cárcel,
como en un sueño atroz.
La hermosa máscara ha cambiado,
pero como siempre es la única.
¿De qué me servirán mis talismanes:
el ejercicio de las letras,
la vaga erudición el aprendizaje de las palabras que usó el áspero Norte
para cantar sus mares y sus espadas,
la serena amistad,
las galerías de la Biblioteca,
las cosas comunes, los hábitos,
el joven amor de mi madre,
la sombra militar de mis muertos,
la noche intemporal, el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo,
es la medida de mi tiempo.
Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente,
ya el hombre se levanta a la voz del ave,
ya se han oscurecido los que miran por la ventana, pero la sombra no ha traído la paz.
Es, ya lo se, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera y la espera
y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.
Es el amor con sus mitologías,
con su pequeñas magias inútiles.
Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.
Ya los ejércitos que cercan, las hordas.
(Esta habitación es irreal;
ella no la ha visto.)
El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo
Jorge Luis Borges